jueves, 17 de enero de 2008

Ace Combat 6 (Luis)

Sirva este conducto para enviar un cordial saludo a todos los queridos lectores de su todavía más querido "Ministerio de la Buena Onda", y aprovechar para decir que, de alguna manera, no se había actualizado este blog, porque los otros dos ministros no han posteado nada... me pregunto ¿ya no van a postear? ¿les dio miedo el nivel al que puede llegar el discurso? en fin, cualquiera que sea la respuesta, el efecto es el mismo, el hecho de no haber publicado ninguno de los otros dos, hizo que un servidor se abstuviera de publicar algo, porque consideraba que sería algo rudo de mi parte postear, sin que nadie más lo haya hecho... en fin, el estado de descuido que tuvo este blog por casi dos semanas no lo pude soportar más, y heme aquí, posteando sobre un juego nuevo.
Peeeeero, primero, un antecedente a este juego, porque debo decir que yo no lo adquirí, sino que fue precisamente otro ministro de la buena onda el que lo hizo, por lo cual, ilusamente, pensé que él lo reseñaría, pero al parecer mis tareas y obligaciones en este blog son muy precisas y nadie quiere reseñar videojuegos, si no soy yo, en fin, de cualquier manera, seguramente la reseña del ministro que compró Ace Combat 6, sería algo así como: “Es un juego de naves, ya sabes, chingón ¿no? Despegas y disparas, ha, también vuelas, pero justo cuando estaba a punto de aterrizar y terminar mi misión, zas, que se sale el agua del escusado, al mismo tiempo que me abren la puerta del baño y alguien a lo lejos grita, ¡los aviones ya pasaron de moda! A lo cual yo le dije, ¡al igual que He-Man, los aviones jamás pasarán de moda, maldito subnormal!”
En fin, pasemos a lo que de verdad nos importa, que es la reseña de este bonito simulador de combate aéreo. En esencia, sigue siendo tu típico Ace Combat, (digo, por algo tiene un número seis, al lado del título) te encargas de tripular diversas naves de combate modernas, desde un F16, hasta otros cuyo nombre no quiero acordarme, con una gran variedad de arsenal, el cual deberás escoger al principio de tu misión, y que en verdad debes tener algo de táctica para el efecto de escoger tu arsenal, porque tus objetivos pueden ser, por decir algo, tanques e instalaciones militares, entonces, tu weapon of choice deben ser todos los misiles air to ground, ya sean teledirigidos, o de precisión, al elección es tuya finalmente, dependiendo también de tu habilidad para tripular los diversos jets, así como también el tino que tengas al momento de usar el armamento que no es teledirigido, pero que sí puede causar más daño que los dirigidos.
El apartado gráfico es bueno, tienes muchos detalles que se pueden apreciar mejor al terminar tu misión, cuando pasan la repetición de la escena que recién terminaste, y por otra parte, durante el férreo combate, es difícil que prestes atención en todos los detalles, como ver el ataque que tus aliados realizan a otros blancos, o a los mismos sobre los que tu vas y que tu escuadrón te brinda apoyo.
Sin embargo, no todo es miel sobre hojuelas, porque algunos aspectos como la física de los escenarios no se sienten tan de siguiente generación, por ejemplo, cuando un misil alcanza a impactarse en un puente, éste permanece inmune al proyectil, lo cual, con la potencia gráfica de las consolas actuales, hace que ese tipo de detalles no tengan problema en darse dentro del juego. Además, la jugabilidad es complicada (al menos con el control tradicional, quizá con el joystick especial –ya sabes el típico control que sacan con forma de palanca de avión, para que te sientas Tom Cruise en Top Gun– mejore este punto), pero nada que no pueda arreglarse con una tarde jugando.
La historia es buena, sin ser nada del otro mundo, finalmente en los simuladores, es típico que la historia no trascienda tanto, pero esta en especial, no apesta, por el contrario, algunos puntos son agradables, como el hecho de contar el conflicto entre países ficticios, desde diversos puntos de vista, el general invasor, viejo pero sabio; la refugiada, que regresa a casa para buscar a su hija; el piloto capturado, que desde la celda de prisión es testigo de los cambios en la marea de la guerra…
Finalmente, pero no por ello menos importante, está el juego on line, el cual, deberán saber que ¡ESTÁ DOMINADO POR LOS JAPOS! Así es amigos, me metí a las tablas de rankeo y es abrumadora la cantidad de Japoneses que juegan este título y que de verdad son buenos, la verdad me tardé mucho en encontrar un mexicano en la tabla, pero a menos que me haya saltado a muuuuchos, el primer mexicano rankeado en este juego, se encontraba por el lugar mil y tantos, lo cual sí me sorprende porque tanto en los videojuegos como en los chistes, siempre hay un mexicano. En fin, debo confesar que no soy un as de combate, y el hecho de entrar al modo on line me dio miedo, porque de por sí es un poco agresivo entrar a cualquier juego on line donde todos los participantes (por lo general) son muy competitivos, pues ya podrán imaginar mi temor… pero me sacrifiqué para poder hacer una reseña completa en nuestro amado “Ministerio de la Buena Onda” y debo decirles que en cuanto entré al juego en línea, lo primero que pensé fue, “ojalá me toque un juego de todos contra todos, en donde no deba escuchar a nadie que me regañe, diciéndome novato o cosas así”, pero en fin, al darle al quik mach (que es con chocolate) resultó que este soldado novato se vio de repente enrolado en una pequeña guerra, piloteando un carísimo jet de última generación, volando para el Bravo Team (entienden lo que digo!! Team!! Es decir, que seguro me caaagaría algún gringo por apestar demasiado en el juego!)… Y empezó, de repente me sentí bien chingón, volando al lado de cómo otros ocho weyes, todos con diferentes aviones y armamento, por un momento pensé, seguro ganamos! Al escuchar por la diadema, lo supe de inmediato, eran gringos treinta añeros, y los identificas fácil, no dicen groserías (o por lo menos no tantas) como al adolescente promedio que te encuentras jugando Halo 3, pero eso sí, bien clavados, y bueno, entre mis nervios, lo malo que soy para volar y el inglés entre cortado que se escuchaba por mis ocho compañeros, pues la verdad es que no les entendía cuál era la estrategia, aunque sí era divertido ver que mi avioncito tenía la bandera de mexa, y los demás la de las barras y las estrellas, así que todo mi equipo sabía que había un piloto mojado con ellos. Pero pensé, “chingá, sí el 201 quedó bien parado… pues ¿por qué yo no?”, y ahí me tiene, presionando a fondo el acelerador del avión, listo para disparar la metralla y los misiles a cuanto enemigo tuviera al alcance. Perooooo, conforme me acercaba a la zona de conflicto, me percaté que los enemigos no eran ningunos improvisados, no, no, no, daban unas vueltas, y unos giros, tenían una técnica, se sacudían a los cazas, no, no, no, cualquier cosa que les cuente se queda corta, y, finalmente, me di cuenta que, conforme me acerqué a alguno de mis enemigos, sus aviones tenían unas banderas blancas, con un circulote rojo, rojo, rojo, lo cual me hizo exclamar un leve, ha, ahora todo está claro. El resultado al final de mi primer combate en línea: me derribaron unas ocho veces y yo no derribé a nadie… creo que perdimos por mi culpa.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Gran entrada, Luis es el mejor ministro!

Oinot dijo...

eisu conbatto roku!!

hmmm.. por un momento después de leer la (gran) reseña, me dieron ganas de jugarlo en multiplayer... hace mucho que no destrozo cazas en video... y jugar contra los japos se ha de poner bastante intenso..

naaahhh.. me quedo con los de navecitas ya sea de vista "de lado" o "por arriba".. por cierto.. necesitas jugar dodonpachi

http://www.youtube.com/watch?v=6Dw9Euq9GVA

Oinot dijo...

Nononnnonononono... olvída lo anterior.... mira ESTO....

http://www.youtube.com/watch?v=s7GcLQW8WqQ&feature=related

yo solo pude decir nomamesnomamesnomamesnomames, mientras lo veía